Funcionamiento de las Redes de Telefonía móvil

Hoy en día, las largas distancias no suponen un problema para que cualquier persona pueda entablar una comunicación con otra persona casi de inmediato, gracias al teléfono móvil. La pregunta que seguramente a todos los usuarios de estos terminales se les ha pasado por la cabeza es ¿cómo es posible que nuestras voces puedan recorrer tan larga distancia y llegar a punto que queríamos?
Esto se produce gracias a la red móvil, que está integrado por 3 partes:

1. El conjunto de estaciones bases integradas por antenas o células, las cuales están comunicadas entre si, y operan en un rango de forma hexagonal, permitiendo que no haya puntos muertos entre la formación. Este es el motivo de que se denomine telefonía celular. Lo principal de las redes de telefonía móvil es el medio por el que viaja nuestra información, esto es conocido como ondas electromagnéticas compuesta por rangos de frecuencia (se explica con mayor profundidad en la entrada 3 de este blog).

2. Los teléfonos móviles, estos terminales son los que inician y terminan las comunicaciones. Al iniciar una llamada desde el dispositivo móvil, la estación base de nuestra zona es la encargada de localizar y asignarnos un canal disponible. Cada antena o célula integrada en la estación base utiliza decenas de canales, esto quiere decir, que se pueden realizar decenas de llamadas por cada célula a la vez, y es la frecuencia con la que se emite lo que diferencia un canal de otro. Los canales son las ondas electromagnéticas enviadas y recibidas a una frecuencia determinada. Cuando entablamos una comunicación con otra persona mediante el teléfono móvil quiere decir que lo hacemos en la misma frecuencia. 

Cuando pasamos de una zona a otra, cambiamos a la frecuencia de la nueva célula, y dejamos libre el canal de la célula anterior para que pueda ser usado por otro individuo.

3. La central de conmutación. Al realizar una llamada, nuestro teléfono se conecta a la central de conmutación de la estación base más próximas a nuestra localización y perteneciente a nuestro operador. Cuando la estación consigue asignar un canal, se envía la señal a las diferentes estaciones para localizar al receptor y comenzar con la comunicación, siempre y cuando el receptor esté disponible, esta conexión es posible mediante el número único de nuestro teléfono, si finalmente el receptor está disponible se emite una señal en el equipo receptor para entablar la comunicación.

Pero para comenzar con la comunicación, la central de conmutación del emisor debe haber encontrado la célula en la que se encuentra el receptor, debido a que debe asignarle la frecuencia a la que deben operar los dos terminales.

La estación base es la encargada de llevar el registro de todos los terminales que se encuentran en su radio de alcance. Cada móvil que entra en la zona que pertenece a la célula es localizado por la estación base y registrado en la central de conmutación.